Otra Opción para la Lavadora

Los detergentes químicos dañan el agua, dañan las gomas de la lavadora (disminuyen su vida útil), y además dañan la piel. La exposición a químicos de este tipo debilitan la piel, volviendola más propensa a enfermedades. 

Para lavar la ropa de los bebés se recomienda usar jabón en barra suave, para bebés, pero hay aún otra opción, que no sirve para sacar las manchas amarillas de la ropa, pero si la mugre común: es la BOLA DE LAVAR ROPA, cada vez más común. Yo la encontré en internet 2 por 27.000 pesos, con envío hasta mi casa. Han funcionado super bien, lo que hacen es disminuir la tensión superficial del agua, que es lo mismo que hacen los detergentes químicos para la ropa (hay que distinguir, que hay detergentes que disminuyen la tensión superficial del agua, y otros desengrasantes, que saponifican, como los para lavar loza), y claro, al igual que estos químicos, no hacen maravillas, para calcetines muy sucios hay que lavar a mano, es lo mejor... Bueno, recomiendo estas bolas de lavar, porque no dejan residuos en la ropa (se nota en el color que les queda), y además eliminan gran parte del cloro del agua, dejando la ropa con olor a limpio de verdad (no con perfumes fuertes, bueno, hay quienes consideran que el peor veneno, el cloro, deja olor a limpio. Yo discrepo de ello).

Dejo el link (para Chile):       http://www.ecoproductos.cl/?p=158

También existen detergentes fabricados en base a plantas, y no a petróleo. Existe una gama de productos para la limpieza del hogar "Eco Friendly", se encuentran como "ECOS". Son norteamericanos, y los venden en un sitio web llamado "Route to green", en CHILE. Envían a todo chile, es una maravilla!, y son super buenos, y a un precio normal, como cualquier lavalozas o detergente para ropas, incluso más barato.

Pañales Chinos

He intentado encontrar paales de tela hechos en Chile, pero no he encontrado, todos son importados, fabricados en China. El problema de que los pañales provengan desde an lejos no es por la calidad o porque contaminen en sí más o menos, sino por una serie de situaciones que en materias de ecología no cuadran bien.

Primero, la huella de carbono de un producto no sólo se mide por lo que se contaminó en su fabricación, sino se incluye todo el proceso desde la siembra y cosecha del algodón o las materias primas que se ocuparan, pasando por el transporte de las materias primas a su lugar de la hechura del pañal, en este caso China, y luego de todas las aguas que se contaminan en la empresa textil, y toda la electricidad que se tuvo que generar de alguna forma (tal vez, igulalmente contaminante), entre otros, hay que contemplar su envío hasta Chile, y luego hasta la localidad en que vivo yo...

Después, en materias de comercio justo, en China se trabaja por casi nada, eso no es justo, y estamos pagando para que eso siga sucediendo cuando compramos productos chinos...

Pero no hay otra opcón, al parecer...

Mitos sobre el pañal de género.

Aquí algunas cosas que se dicen pero en la práctica, no son verdad.

El potito del bebé se irrita con los pañales de género: Todavía no se ha irritado mi bebé, y eso que en las noches no lo lavo para mudarlo, ni le coloco pomadas. Sólo le cambio el pañal, para no despertarlo tanto. Por el día le coloco pomada una o dos veces, nada más.

Los pañales de género son antihigiénicos: Es mentira, uno los lava bien y listo, quedan sin residuos tóxicos, naturales como son. Lo que hay que cuidar es el planchado de estos pañales, sobretodo si se cuelgan afuera (y es el cuidado que hay que tener con toda su ropita) con eso se mata los microorganismos que pudieran tener, pues generalmente, lo he visto, se paran bichitos y moscas en los pañales.

Duran menos horas puestos, hay que cambiarlos más a menudo: Mentira, los cambio cada 4 horas, a veces menos, a veces más, cuando está despierto para no molestarlo mientras duerme, y cuando se hace caca lo cambio altiro. Al final lo cambio igual que como haría con pañales deshechables.